Performance digital de tres bailarines que actúan a tiempo real para un público que los ve en vídeo.
Pieza de danza y performance ejecutada por tres bailarines que portan trajes de captura de movimiento en un espacio de Ginebra, sede de la compañía. Su movimiento es transferido a sus avatares digitales, insertos en un espacio tridimensional generado con un motor virtual, y enviado al espacio donde el público asiste a la pieza. La propuesta juega con escalas, haciendo los cuerpos enormes como edificios; con densidades, al componer los cuerpos ora de manera sólida ora como finos hilos entrelazados; con texturas y con colores, al sobreponerlos sobre los cuerpos. A mediados de 2023 se había representado-proyectado en diez ciudades de ocho países repartidos en tres continentes, sin que la compañía viajase.